Manejo Del Ganado Lechero/Stockmanship
Manejo del ganado lechero
El manejo del ganado lechero seguro y efectivo siempre ha sido muy importante dentro de una operación lechera. Eventos recientes donde aparecen vacas siendo maltratadas dentro de nuestra industria han sido foco de interés de grupos protectores de animales creando una matriz de opinión pública desfavorable a los establos lecheros y su personal.
En líneas generales la gran mayoría personas asociadas con la industria lechera nos encontramos agradecidos con éste noble animal y siempre ponemos como prioridad el bienestar de las vacas y el tratarlas lo más humano posible, desgraciadamente por unos pocos que no lo hacen, pagamos todos.
Es bien sabido que el tratar bien a la vacas es necesario y es también, desde el punto de vista de negocio, “ser inteligente”. Para que una vaca alcance su mayor productividad tiene que estar contenta.
Una vaca estresada se enfermará más, disminuirá su eficiencia productiva y reproductiva, y necesitará medicina, más atención y utilizará más tiempo de los empleados que cualquier vaca sana dentro del hato. Es por todo esto que si queremos aumentar la rentabilidad de nuestro establo debemos y tenemos que saber cómo manejar el ganado apropiadamente.
Por lo general, es bien común encontrar en cualquier lechería trabajadores que piensan que saben mover y tratar el ganado eficientemente, es algo que se hace varias veces durante el día y todos los días en el establo. Pero si le preguntamos a los empleados quién les enseñó a trabajar y mover el ganado, la respuesta será “aprendí viendo como otras personas lo hacían” ó “aprendí en el trabajo haciéndolo todos los días”.
Lo único malo con estas respuestas, es que nadie ha enseñado formalmente a sus empleados a mover el ganado creando la menor cantidad de estrés posible. Además, muchísimos trabajadores de las lecherías han aprendido a mover las vacas intuitivamente ya que en sus lugares de orígenes ó nunca han trabajado con vacas ó nunca han trabajado con vacas lecheras de muy alta producción.
Por lo tanto, si queremos mejorar como manejamos los animales debemos de estar conscientes de los siguientes principios y conceptos claves a la hora de manejar ó interactuar con el ganado lechero:
Principios:
La vaca pertenece a los animales de presa y el hombre pertenece a los depredadores.
La vaca siempre quiere saber dónde estás y te quiere ver.
La vaca quiere evitarte y se moverá a tu alrededor, es decir que quieren alejarse de ti.
La vaca quiere estar en un lugar dónde se sienta segura.
La vaca quiere estar con otras vacas y se moverá adónde están otras vacas.
La vaca sólo puede procesar en su cerebro un pensamiento a la vez.
La vaca nunca se equivoca.
Conceptos Claves:
El manejo de las vacas es el resultado de la comunicación de doble vía entre vaca – manejador y manejador – vaca, donde la vaca siempre será constante con sus respuestas y el manejador, normalmente, es el que no mantendrá la constancia en sus acciones.
Las vacas reaccionan y se mueven cuando se ejerce presión en su zona de confort, también llamado espacio vital, (ver Figura 1).
Cada movimiento que hacemos, cuenta y es importante. Al movernos nosotros ó mover parte de nuestro cuerpo es igual que el “hablarle” una vaca pero sin emitir sonidos. De hecho, según algunos estudios científicos señalan que no hay diferencia alguna entre pegarle y gritarle a las vacas. No hage ninguna de estas cosas.
Para mover y trabajar las vacas rápido hay que caminar y hacerlo despacio. La velocidad promedio de una vaca es de 2 millas por hora. La velocidad promedio de los seres humanos es 3 millas por hora.
Cuando decidimos presionar una vaca, es decir que nos metemos en su zona de confort para que ella se mueva, lo debemos hacer por un lado, nunca por detrás donde la vaca no pueda vernos. Debemos movernos desde el frente de la vaca hacia un lado de ella.
Cuando trabajemos ó movemos animales siempre tenemos que ser constantes.
Si caminamos en la misma dirección que la vaca se está moviendo, entonces cuando alcanzamos su punto de equilibrio, la vaca disminuirá su velocidad e inclusive se detendrá, (ver Figura 2).
Si caminamos hacia la vaca en dirección opuesta hacia dónde se debe mover, entonces la vaca inicia ó acelera su movimiento.
Sólo debemos aplicar presión cuando las vacas tienen espacio adonde moverse.
Cuando no hay más remedio y tenemos que presionar vacas por detrás, nos tenemos que asegurar que la estamos dentro del campo de visión de la vaca.
Hay que destacar que la cultura de tratar adecuadamente a la vaca debe venir de la alta gerencia del establo. Son los dueños y gerentes los que deben dar el ejemplo y exigir a los trabajadores que traten a las vacas de una manera apropiada, humana y respetuosa. Aún más, es responsabilidad directa de la gerencia de la operación lechera el entrenar a todo el personal del establo, incluyendo a los que no trabajan directamente con las vacas, en lo que es el manejo correcto del ganado lechero.
En resumen, podemos afirmar que hoy en día, nuestra industria no puede darse el lujo de seguir permitiendo ninguna forma de maltrato ni de comportamiento abusivo hacia los animales. Además de ser incorrecto tampoco es inteligente desde un punto de vista comercial ya que en un establo donde las vacas no están manejadas adecuadamente, la incidencia de enfermedades, lesiones, y la ineficiencia productiva serán mayores traduciéndose todo esto en grandes pérdidas económicas para la operación lechera.
Por último, debemos recordar que las vacas siempre van a reaccionar de una manera predecible y va a depender de cómo nosotros las manejamos para que ésta reacción sea positiva y favorable.
Articulo hecho por: Santiago Ledwith, Entrenador/Consultor de Action Dairy, Progressive Dairyman, Traducción MVZ Brenda Cruz, Alta Genetics en Español.